lunes, 8 de julio de 2019

sin grises


Ese día me corte y sangre, pero no te lo conté como muchas otras veces que sangré y no te dije. Nos vivíamos cortando, todo el tiempo. Nos dolía, o solamente eso es lo que sentía yo. Cuando después de histeriquear tanto nos pusimos de acuerdo me dijiste que sí, que vaya. Era especial para mí, cumplíamos 3 meses. Nada más, nada menos, pero es mucho para una chica enamorada y con ganas de amar. Corriendo agarre mi mochila, metí un par de ropas. No eran pocas, tampoco las suficientes. Me fui corriendo, pedí plata prestada, perdí un cole, llegue a otro, pero me fui queriendo estar en una cita soñada. Llegue a las 12 de la noche a la terminal. Nadie me esperaba. Nunca me esperaste ahí, aun sabiendo que el viaje es largo y que estaba cansada, nunca. Cuando hablo de cortarnos, hablo de las palabras que eran afiladas, a eso me refiero, y a los actos que lo eran aún más. Hoy hace un año que te conocí por primera vez. No eras lo que me esperaba. Parecías aún mejor, después de un rato. Al otro día te dije qué era lo que esperaba, simple: no arrepentirme. Siempre logro juzgarme por mis errores, dudar de mis elecciones y cuando algo roza el placer y el dolor al mismo tiempo suelo verle el lado malo, no hay grises, así es al final.
Supongo que es un baldazo de agua, porque no me valoraba al estar con alguien con vos que no sabe lo que quiere. Ahora puedo determinar qué quiero en mi vida sin grises.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Chiquitito

16/12/2020  Bueno, tampoco es que iba a hacer de esto un poema o si?. Supongo que no es mi estilo y sabes que con vos soy 0 careta. Si estas...